¡Hola! Mi nombre es Rosario, me dicen Charo, soy de Nogoyá (Entre Ríos), tengo 23 años y estoy terminando mis estudios de Licenciatura en psicopedagogía.
Gracias a Dios nací y me crié en una familia muy cercana a la Iglesia.
Desde que era muy chica siempre soñaba con ser misionera, ir a algún lugar lejano a ayudar, consolar al que sufre. Pero siempre fue eso, un sueño, el cual me parecía muy lejano y una locura.
Conocí “Puntos Corazón”, hace alrededor de diez años, gracias al Padre Arnaud de Malartic. Desde ese momento empecé a plantearme de qué manera yo podía dar a los demás un poco de toda la gracia que Dios había derramado en mi vida.
Como Dios responde con personas, me presentó a una que me hizo ver que esta locura era realmente un llamado de Dios, un regalo que Él tiene preparado para mí desde mucho tiempo.
Así fue que después de mucha oración, discernimiento y acompañamiento espiritual, fui dejando los miedos y las inseguridades de lado para decirle “Sí” a esta experiencia de amor y compasión que Dios me propone.
Me siento realmente feliz por este llamado y muy amada por Dios. Así es que me estoy preparando para salir por 12 meses el 2 de mayo del año 2017 al Punto Corazón «Beato Faustino Pérez» en San Salvador (El Salvador).
“Los deseos del corazón son presagios de Dios al alma, Dios te hará desear lo que Él te quiere regalar”