Ella hizo misión hace muchos años en Brasil y nos invitó a su casa junto a su familia para hacer las tradicionales humitas, plato típico de maíz molido con sal, mantequilla y queso envuelto en una hoja de choclo. Fue muy divertido (porque por muchos intentos que hacíamos no nos salían prolijas). Pero este fue uno de los momentos donde tomé verdaderamente conciencia de la importancia de conocer y apreciar la cultura y las tradiciones de cada país.
Fue un regalo también, que, para el 9 de julio, día de la Independencia Argentina, junto con Francisco, antiguo voluntario ecuatoriano que hizo misión en nuestro país, pudimos preparar en nuestra casa empanadas criollas.
Días previos, el 4 de julio, también celebramos la independencia de Estados Unidos, con platos y canciones típicas que realizó Francesca, mi hermana de comunidad que vive allí.
Estos momentos hacen que nos sintamos en casa a pesar de la distancia y nos hacen vivir con más alegría cada día de nuestra misión.
