Niña Argentina falleció el pasado 6 de enero, día de los Reyes Magos. Día de la Manifestación del Señor. Él se le manifestó a nuestra querida amiga, en la Luz que no tiene ocaso. Ella vivía en el barrio donde está implantado el Punto Corazón “Faustino Pérez” desde hace 26 años.
Junto con su familia siempre ha estado muy cercana a los misioneros: no cesaba de darles cariño y regalarles una amistad incondicional. Cuando pienso en ella me vienen tres palabras: fidelidad, delicadeza y generosidad. Su presencia era como la de la Virgen María, discreta pero bien presente, valga la redundancia, en el diario vivir de los jóvenes misioneros. Donde quiera que yo haya estado, siempre recibía una cartita de Niña Argentina, quien aprovechaba el viaje de algún misionero para confiarle su misiva. ¡Siempre fiel a la amistad! En estos años, cada vez que iba a su barrio, ella se enteraba y no tardaba en venir a saludarme. Pero no llegaba con las manos vacías. Al Al igual que su corazón, sus manos estaban llenas, trayendo chocolate de puro cacao, un juguito, un regalito… Luego, sólo me tomaba de las manos, me miraba como si era la primera vez que me veía. ¡Cuán mimada y amada por Dios a través de ella! Y todos los voluntarios que pasaron por El Salvador podrían hacer una larga lista de sus gestos discretos. ¡Una bellísima persona! La abuela de Puntos Corazón, como le solían decir los voluntarios. ¡Qué Dios me conceda la gracia de esta misma calidad de presencia de Niña Argentina! ¡Mil gracias querida amiga!