Ver cómo el otro se asombra ante una conversación con un amigo, asombrarte con ellos por su propio asombro. La comunidad me ayuda a seguir, a ver la realidad tal y cómo es, a vivir en la tierra, con los pies en el suelo, pero con la mirada puesta en el Cielo. La comunidad es un lugar donde puedo ser yo misma, con mis costosos despertares, mi inglés regulero, y mi tamil terrible. La comunidad es la familia que la Virgen me ha puesto durante este tiempo. La comunidad es aquella que me ayuda a avanzar hacia el Cielo. También la comunidad puede ser una cruz o algo que trabajar, ya que, además de ver tus debilidades, ves también las del otro, y hay que aprender a amar al otro tal y cómo es.
