De José Toibero, en Lima-Perú
Ella es una mujer de unos cincuenta años, que vive hace mucho con una depresión que la lleva a estar acostada en su cama todos los días. Hay veces que cuando la encontramos confía sus pensamientos entre lágrimas. Pero aquel día fue distinto, fuimos pensando encontrar a nuestra amiga como siempre, postrada en su cama. Pero no, estaba de pie, barriendo su casa y al escucharnos llegar prepara unos bancos en la puerta de su casa, dándonos una acogida inesperada para mí. La charla se dio y hablamos de muchas cosas y ya cuando la conversación se apagaba un poco mi hermana de comunidad propone una oración, a lo que ella responde diciendo que le gustaría leer la Biblia. Entonces la propuesta cambió, hicimos una meditación de un pasaje de la Biblia que tenía ella en su casa.Sus palabras nos dejaron sin palabras (permitiendo un juego de palabras). Este momento me dejó con mucho entusiasmo de nuevos encuentros con ella, y de la misma forma poder conocer un poco más de su historia. Lo que surgió luego de ese encuentro en mis oraciones fue: “estamos hechos para ser Otro, no nosotros”.
